Entrevita a Paris Hilton tras pinchar en Ibiza como Dj

Esta entrevista ha sido publicada en El Mundo y si no eres abonado no la puedes leer...A mí me ha resultado muy interesante, por lo que la comparto.

P.- ¿Quién es cuando no es Paris Hilton?
R.- Pues yo misma, sólo que [pausa larga para respirar] descanso


Paris Hilton
McCain la comparó con Obama y entonces su chihuahua escribió un ‘bestseller’. Si sus seguidores saltaran a la vez la Tierra recuperaría su órbita. Camisa de once varas en una de fuerza. La diva DJ pide un abanico y danza: ‘Paris, Ibiza, lobotomía...’

«No quiero tener que pedir asilo político en España»

RICARDO F. COLMENERO


«Es muy seria», me advierte uno de sus ventrílocuos. Saco el bolígrafo para abrir la matriosca. Sale una diseñadora, una multimillonaria, una cantante, una actriz, una modelo, una show woman, una DJ. ¿Dónde se habrá metido esta mujer?

Se abre el telón y aparece Paris Hilton, el personaje interpretado por Paris Hilton (Nueva York, 1981), la desconocida superheredera del imperio hotelero haciendo una resta en una pizarra, 500- 100. ¿Cómo se llama la película? «300»... Ni una sonrisita. Esto empieza fatal.

Pregunta.– Ejem... pues hay una teoría en internet que dice que Paris Hilton no existe, y que es sólo un producto de la CIA para distraer a las masas.

Respuesta.– [Risas. Menos mal]. Existen varias teorías pero no puedo hablar de ellas. Ya sabe usted cómo están las cosas con los que filtramos información confidencial y no quiero tener que pedir asilo político en España.


P.– Entiendo, entiendo, pues hay otra que dice que usted es una alienígena, pero le reconozco que creo que ésta podría ser verdad.

R.– [Más risas]. Bueno, hay un poco de eso y de otras cosas, pero le repito que todo está siendo vigilado, así es que no le confirmo ni le desmiento nada.


P.- ¿Qué escucha la CIA por los micrófonos ocultos de su mansión de Beverly Hills? ¿Sus canciones?

R.- Y muchas risas, y el ladrar de mis perros, y alguna que otra cosa... [sonrisa picarona].


P.– ¿Cuándo se convirtió en la rubia tonta más lista del mundo?

R.– ¿Rubia? Creía que era morena. ¿Acaso las morenas no podemos tener algo de tontas?


P.– [Me escondo entre los folios] ¿Qué sería más difícil encontrar en su habitación: el Ulises de Joyce o toallas robadas de un hotel Hilton?

R.– Ni lo uno ni lo otro, pero seguro que muchas revistas de moda y algún que otro balance del banco.


P.– Y muchos antifaces para dormir, por lo que he averiguado. ¿Teme ver algo en sus pesadillas?

R.– Síííííí, antifaces con diamantes. La verdad es que no tengo pesadillas cuando duermo pero reconozco que a veces las tengo cuando estoy despierta.


P.– Blancanieves Hilton, ¿qué le dice a su espejito por las mañanas?

R.– Espejito, espejito ... ¿quién es la más atareada del mundo? A veces me faltan horas para hacer lo que quiero, lo que debo y, sobre todo, lo que necesito.


P.– ¿Qué no le cabía en las 22 maletas que se trajo para venir a Ibiza?

R.– Mis adorables mascotas.


P.– ¿Qué recuerda tras su Amnesia [La discoteca en la que ha pinchado estos días en Ibiza]?

R.– Todavía estoy en ella, y envuelta en espuma, y por alguna razón no dejo de sonreír y pensar cuándo será otra vez.


P.– Paris for president fue solo una canción pero, ¿le parece correcto que para muchas adolescentes sea una realidad?

R.– Creo que la percepción es mucho mayor que la realidad. Mira, los adolescentes deben soñar para que puedan cambiar las cosas. Ahora hay que dejarlos soñar.


P.– Es que la hija de un compañero dice que no quiere estudiar ni trabajar, que solo quiere ser famosa como Paris Hilton. ¿Qué no hay que estudiar para ser Paris Hilton?

R.– Pues para ser Paris Hilton hay que trabajar mucho.


P.– ¿Y para ser presidenta de los Estados Unidos? En su canción decía: «Mirad a Bush, no puede ser tan difícil».

R.– Bueno, decía miradlo solamente. Creo que Bush necesitaba ser observado en su momento histórico. Nada más.


P.– ¿Sabe que con su eslogan No soy vieja, ni prometo cambios pero sin embargo estoy buena le habría sido suficiente para entrar en el Gobierno de Silvio Berlusconi?

R.– [Risas] ¡Cómo se divierten los italianos!


P.– También prometió que, como presidenta, todo el mundo tendría diamantes, ¿alguna otra idea contra la crisis económica?

R.– Creo que tenemos que trabajar más y pensar menos en la crisis económica.


P.– ¿No cree que estaría mal que el chihuahua de la presidenta llevara ropa más cara que sus votantes?

R.– Muy mal, pero a veces el amor a tus mascotas supera todas las comparaciones.


P.– Si su chihuahua escribió un libro de memorias, ¿hará de negro de las suyas?

R.– Pues estoy intentando convencerle.


P.– Usted fue compañera de clase de Lady Gaga en un colegio de monjas, ¿qué demonios les enseñaban en ese colegio?

R.– Todo lo que no debíamos lo aprendimos después de clase.


P.– Elsa Pataky dijo en estas mismas páginas que vivir en Los Angeles era más aburrido que España, ¿está de acuerdo con ella o con Charlie Sheen?

R.– Cada cual vive dentro del mismo universo de formas diferentes. Por cierto, ¿quién es Elsa Pataky?


P.– [Ay, ay, ay] Casi todas las actrices del mundo quieren ser una chica Almodóvar y aprovechan para pedirlo en cada entrevista que les hacen.

R.– Yo soy una chica Paris Hilton y con ello ya estoy muy atareada. Quizá otro año.